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Comunicación y Opinión

El agua, recurso escaso

El agua, recurso escaso

No es un secreto que la vida en la Tierra sería imposible sin el agua dulce, pero cada vez es más evidente que pronto estaremos en un planeta con carencias de este oro líquido.

A pesar que de que tres cuartas partes del planeta están cubiertas por agua, sólo el 1% es agua potable,  disponible en ríos, lagos y corrientes subterráneas.  El 97% es agua salada, y el 2% restante se encuentra helada. Lo que significa que nos encontramos con un recurso no tan abundante, sobre todo porque puede ser agotado y su distribución es irregular dependiendo de los climas y las lluvias.

Hoy en día el agua sigue siendo es un privilegio en muchas partes del mundo, el 20% de la población mundial, 1.100 millones de personas  carecen de ella.

La insuficiencia de agua potable lleva consigo graves problemas de salud, algunos de ellos incluso mortales. Así, el Banco Mundial calcula que cada año 900 millones de personas sufren de enfermedades diarreicas relacionadas con el agua; y debido a su escasez mueren aproximadamente 5 millones de personas por año, diez veces más que las que mueren en guerras cada año. La mayoría de estas personas viven en países del Sur, y los que se encuentran más expuestos a estos riesgos son los niños y las personas mayores. En uno de estos países, Kenia, se produce un ejemplo surrealista que nos anticipa la escasez del agua para las décadas venideras, y es que la Coca-Cola en este país africano es más barata que el agua. Igualmente, existen grandes disparidades entre los precios que se pagan por el agua en el mundo y cuanto mayor es el nivel de pobreza más se debe pagar por el agua limpia. De este modo, el 20% de los hogares más pobres de El Salvador, Jamaica y Nicaragua, gastan de promedio más del 10% de sus ingresos en agua, mientras que en el Reino Unido dedicar más del 3% de los ingresos familiares al agua supone estar en condiciones de vida difíciles.

Un futuro nada halagüeño

El consumo mundial de agua potable se multiplicó por seis entre 1900 y 1995, más del doble de la tasa de crecimiento de la población. Por lo que si continuamos con este ritmo en el año 2025 los habitantes que podrían carecer de acceso al agua serían 50%.

Las causas de este aumento serán: el incremento demográfico, la elevación del nivel de vida en los países en desarrollo, que se traduce en mayor consumo de agua, el aumento de vertidos industriales y el cambio climático, que favorece sequías e inundaciones. A todo esto, hay que añadir el reparto aleatorio de la lluvia, que se distribuye de una manera completamente irregular.

¿Qué podemos hacer para ahorrar agua?

Según un informe de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), el 51% de los consumidores españoles no sabe cómo ahorrar agua, y lo que es más alarmante, muchos encuestados aseguran no están interesados en las medidas para ahorrar agua, bien porque creen que son caras (38%), reducen la comodidad (22%) o son complicadas (21%).xxPero algunas medidas muy sencillas, y que no restan calidad de vida, nos permitirán ahorrar muchos litros de agua, contribuyendo al medio ambiente que cada vez es más necesario para la conservación de este recurso agotable.

    Colocar dos botellas llenas dentro de la cisterna ahorra de 2 a 4 litros en cada uso. Asimismo, evitar usar el inodoro como papelera.
* Cerrar el grifo al lavarse los dientes o afeitarse ahorra hasta 10 litros.
* Ducharse en cinco minutos, en vez de bañarse, ahorra hasta 150 litros, y evitar las duchas de las playas.
* Arreglar las averías de grifos y cañerías lo antes posible: Un grifo que gotea pierde hasta 30 litros diarios. Instalar mecanismos de ahorro en los grifos, y decantarse por los de tipo "monomando".
* Lavar la fruta y verdura en un cuenco ahorra hasta 10 litros de agua.
* Regar al anochecer para evitar pérdidas por evaporación y sólo lo necesario. Optar por plantas autóctonas, que necesitan menos agua.
* Poner en marcha la lavadora o el lavavajillas sólo cuando estén llenos, y comprar modelos de uso eficiente del agua.
* Si friega a mano, utilice una pila para enjabonar y otra para aclarar, y si no tiene dos pilas, utilice un barreño.
* No dejar mucho tiempo la vajilla sucia porque cuesta más limpiar. Fregar los platos justo después de comer
* No abusar de la lejía, porque dificulta el trabajo de las depuradoras, y utilizar detergentes ecológicos, sin fosfatos.
* Al cocinar, medir la cantidad de agua que necesita hervir, para evitar su derroche por la evaporación. Si tapa la olla, hervirá más rápido, y apague la llama nada más completarse la ebullición.
* Al esperar que salga agua caliente aprovechar para llenar recipientes con el agua fría para utilizarla en otras cosas.
  

Tomado de: http://www.extremaduraaldia.com/reportajes/el-agua-recurso-escaso-.y-espana-la-desperdicia/43357.html 

Francisco Garcés

 

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